LACNIC 27: tres experiencias de implementación de IPv6 en la región

31/07/2017

Cada vez más empresas y organizaciones de la región despliegan IPv6 en sus redes, lo que ha llevado a un aumento considerable del tráfico sobre ese protocolo de Internet en América Latina y el Caribe.

Los asociados a LACNIC tienen claro que el despliegue de IPv6 es la herramienta fundamental para mantener su nivel de desarrollo de Internet.

En el último evento de LACNIC, realizado en Foz de Iguazú, tres profesionales responsables de diferentes organizaciones regionales de Internet que han sido pioneras en el despliegue de IPv6, compartieron su visión sobre este asunto durante el panel “Casos de éxito en implementación de IPv6 en la región”.

Alejandro D’Egidio, jefe de Backbone de Telecentro, una de las empresas que masificó el uso de IPv6 en Argentina, aseguró que desde un comienzo fue una decisión estratégica. “Desde hace unos años estábamos preparados para el agotamiento de IPv4 y por ello resolvimos el despliegue inmediato de IPv6. Había que ganar en experiencia para mantener una calidad muy alta en el servicio”, aseguró.

D’Egidio consideró que las organizaciones no deben temer el tránsito de IPv4 a IPv6 y relató que todos los obstáculos que se han presentado a Telecentro “tuvieron solución”. Dijo que hay muchos temas que van a depender del negocio en particular de cada empresa. “Hay que trabajar con tiempo en la elección y la configuración de la tecnología para después evitar un recambio tecnológico. Una de las claves es capacitar a todos los sectores para que puedan participar y estar preparados”, culminó el ingeniero argentino.

Crecimiento agresivo. La experiencia de Telefónica en Brasil –una de las organizaciones más grandes de ese país y de América Latina y el Caribe- estuvo directamente vinculada al crecimiento del negocio.

Fabio Scartoni, gerente de Ingeniería de Telefónica Brasil, contó que desplegaron IPv6 para garantizar el crecimiento de los servicios ante el agotamiento de IPv4. “Estábamos ante un crecimiento muy agresivo de banda ancha y teníamos la preocupación de garantizar que continuaríamos creciendo en nuestros servicios. La solución inmediata podía ser un NAT para soportar la venta, pero era temporaria, porque la solución final era IPv6”, señaló Scartoni.

Telefónica Brasil lleva ya seis años trabajando con IPv6 y actualmente cuenta con un tráfico “bastante significativo”, según su responsable de Ingeniería.

El camino, detalla Scartoni, no resultó fácil. Primero hubo que convencer a la empresa de un asunto tan técnico que era tan importante y sin que aquello generase un nuevo servicio. “IPv6 tiene esa dificultad de que estoy cambiando la red para llegar al mismo lugar donde ya estoy. En la época me preguntaron “Fabio, ¿eso no va a ser la misma cosa que el Bug del milenio que todo el mundo dice que va a acabar y eso no acaba nunca?”. Y yo le dije “Juro que va a acabar, crean en mí”.

Después que estuvo la decisión, el área de Ingeniería de Telefónica enfrentó desafíos técnicos. “Uno que destacaría es la cuestión de la compatibilidad de los dispositivos. Tuvimos mucho trabajo con cada uno de los modelos y equipamientos que vendemos, con cada uno de los proveedores para garantizar que eran compatibles. Hubo que ir al laboratorio y testear para tener la certeza de que en el momento en que implementásemos el servicio iba a continuar funcionando y hacer un trabajo transparente”, afirmó Scartoni.

Obligación con el cliente. Joelson Tadeu Vendramin, de la Compañía Paranaense de Energía (COPEL), afirmó de forma tajante que la declinación en 2013 de la cantidad de direcciones IPv4 –cuando ya se preveía su agotamiento- fue determinante para que se tomara la decisión de desplegar IPv6.

“COPEL tenía la obligación de atender el mercado minorista y el número de clientes comenzó a crecer en forma exponencial y la realidad era partir para IPv6, no existía otra opción”, dijo Tadeu Vendramin.

El principal obstáculo que se presentó al área de ingeniería de COPEL fue adaptar la cadena de equipamientos para el nuevo protocolo: desde el backbone de la compañía hasta la casa del usuario. “Muchos equipos tuvieron que ser cambiados porque no tenían el soporte al protocolo IPv6. Ese ha sido el mayor obstáculo. Se puede decir que hoy ya fue vencido. En 2017 ya tenemos equipamientos que hablan IPv6, y lo que vemos como desafío futuro es diseminar el protocolo en las puntas de las redes, ya sea en el dispositivo final del usuario o en el servidor al que está accediendo”, aseguró el funcionario de COPEL.

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